5 formas de construir una cultura de retroalimentación

Crear una cultura de retroalimentación dentro de tu equipo hará que sea mucho más fácil dar y solicitar retroalimentación, aumentando su regularidad y efectividad. Tus empleados se sentirán empoderados y motivados, y se desarrollarán más rápido. Es la piedra angular de una cultura de equipo de apoyo.

Un buen ejemplo de una empresa con una fuerte cultura de retroalimentación es la firma de consultoría McKinsey. Los equipos dan y reciben comentarios con frecuencia, a menudo varias veces al día. La compañía ha creado una cultura de retroalimentación y mejora continua que permite a las personas desarrollarse rápidamente y prepara a los equipos para desempeñarse a altos niveles.

No es casualidad. Desde la primera semana de empleo, los consultores reciben capacitación sobre el valor de los comentarios, cómo darlos y cómo recibirlos. Al comienzo de los nuevos proyectos, los equipos generalmente discuten cómo y cuándo les gusta recibir comentarios.

¿Qué haría este tipo de cultura para tu equipo?

Pasos clave

1. Aprende cómo los miembros de tu equipo desean recibir comentarios.

Establece reuniones 1 a 1 para comprender la frecuencia y el tipo de comentarios que desean. Elije un entorno tranquilo, cómodo y privado para crear un ambiente más abierto y reducir las reacciones negativas o defensivas.

2. Liderar con el ejemplo.

Incluso si es difícil al principio, debes comenzar a dar retroalimentación de refuerzo y redireccionamiento .

3. Solicita comentarios de los miembros de tu equipo sobre el desempeño del equipo, y el tuyo.

Puedes hacer preguntas como "¿Tienes algún comentario para mí sobre el proyecto que terminamos hoy?" o “¿Puedes compartir tus pensamientos sobre el proceso de redacción del último informe del producto? ¿Qué podría haber hecho mejor? Algunos de tus comentarios pueden ser difíciles de escuchar, pero, francamente, no puedes esperar repartirlos si no puedes tomarlos.

La capacidad de aceptar y aprender de los comentarios es una de las características de un gerente experimentado. Si nada más, al recibir continuamente comentarios de tu equipo, aprenderás qué hacer, y también qué no hacer, cuando das tu opinión a los demás.

4. Logra que pedir comentarios sea un hábito.

Puede llevar un tiempo demostrar a los miembros de tu equipo que el mundo no se acaba si le dicen algo que no quiere escuchar. Como cualquier hábito, debe comprometerse a largo plazo.

5. Dar comentarios sobre los comentarios

Utiliza comentarios de refuerzo para alentar aún más a las personas cuando le den buenos comentarios o cuando hagan un buen trabajo al recibir sus comentarios. También puedes solicitar comentarios sobre sus comentarios. Por ejemplo, puedes preguntar: “¿Qué tan útil es la retroalimentación que te he estado dando? ¿Cómo puedo mejorar?

Seguir estos pasos motivará y alentará a tu equipo a convertirse en profesionales de la retroalimentación. Pero no importa cuán fuerte sea tu cultura de retroalimentación, también necesitarás aprender a manejar situaciones de retroalimentación particularmente difíciles.

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